El proyecto propone 28 viviendas en un bloque en esquina, entre medianeras, de sótano, planta baja, primera, segunda y bajo cubierta. Cuenta por deseo de la propiedad con una gran variedad tipológica, con unidades de 2, 3 o 4 habitaciones y en diferente disposición.
Se dispone un sólo acceso y un sólo núcleo vertical de comunicación. En el vestíbulo del edificio se genera un patio en triple espacio, comunicando e interrelacionando el conjunto. A través de esta entrada de luz natural se jerarquiza y referencia este espacio respecto a los pasillos de acceso a las viviendas. En la planta baja se disponen cuatro viviendas con acceso independiente desde la calle, a modo de vivienda unifamiliar pasante, con patio posterior.
La fachada manifiesta de manera intencionada la diversidad tipológica interior, especialmente en cuanto a las terrazas. En este sentido, se disponen las persianas discurriendo por la parte exterior del voladizo, apropiándose del uso climático y de relación de las antiguas persianas ‘de cuerda’.